De hecho, llevas manifestando desde el momento en que la chispa de la vida encendió tu ser en este mundo... Entonces fuiste materia, empezaste a ser quien eres,. No me atrevo a decirte qué eras antes, sinceramente no lo sé. Pero ahora estás, aquí, presente. Y tienes el poder de manifestar.
Lo sé, aún te cuesta creerlo. Nos hemos alejado tanto de nuestra intuición y de nuestra esencia que ni siquiera nos damos cuenta del proceso: de cuándo ocurre, de cómo ocurre y de por qué se bloquea. Este post es un recordatorio, una señal que te indica que si, que tu también puedes manifestar. Mi misión es enseñarte cómo y facilitar tu proceso.
Manifiestas lo que eres, desde tu esencia. Por eso las afirmaciones, las visualizaciones conscientes, la música a 832Hz y pensar en positivo no te está dando resultado. Estás en la superficie. Para manifestar lo que quieres hay que ir más profundo, hacia adentro, a la base de tus creencias. Desde ahí podrás desbloquear, reprogramar tus circuitos neuronales para generar realidades nuevas. Realidades más en sintonía con tu ser, no con quien aparentas ser. Es entonces cuando el proceso fluye.
Como ves, manifestar te implica en tus deseos. Te implica para tener el valor de escucharte, y el poder de actuar hasta alcanzarlos. Manifestar te requiere, como ser completo, con todo tu potencial, ese que te hace un ser único en este universo.
Y si, le deja un margen al universo, porque tú también eres universo. Porque no lo controlas todo, por mucho que te empeñes. Trabaja en ti (99%) y permite que suceda la magia (1%).